CRÍTICA RIO

De los creadores de Ice Age nos llega esta semana la nueva apuesta por parte de la FOX para el cine de animación 3D.

La competencia es dura y tanto Dreamworks, como la todopoderosa Pixar están poniendo las cosas muy difíciles en el panorama de la animación de modo que, ¿Consigue  Río despuntar?, ¿Ofrece algo nuevo?, la respuesta es un sí con “pero”. Veamos porqué.

Rio llega en un momento perfecto en las carteleras. Rango pudiera haber sido su competidora mas dura pero evidentemente y si no ha sido retirada ya de la mayoría de cines, está en proceso de “desinflado” en lo que a taquilla se refiere, de modo que la Fox no ha arriesgado mucho y se ha agenciado este momento para lanzar su apuesta. Evidentemente colocar a Río frente a Kung Fu Panda 2 (Dreamworks), o Cars 2 (Pixar) habría sido un suicidio… sin embargo, Río cuenta con buenas armas para plantar cara a cualquier película de animación con la que tuviera que medirse en la taquilla.

Tras Ice Age 3, que sin duda fue la mas insípida de todas y contaba con el argumento mas flojo e intrascendente de la saga, el director y el equipo prácticamente al completo, han decidido viajar a Brasil en esta nueva producción. Río nos narra la historia de Blue, que tras caer de su nido es capturado y perdido en mitad de un gélido pueblecito de Minessota, por suerte la joven Linda da con el pequeño polluelo y lo cría colmándolo de cariño y lujos, sin embargo y pese a la comodidad de su vida, Blue se verá “obligado” a abandonar su hogar para viajar a Río de Janeiro… y es que es precisamente allí donde se encuentra la única hembra de su especie, siendo ambos los últimos dos especimenes del guacamayo azul. Es así como Blue, el último macho, y Perla la última hembra, vivirán una aventura en el marco de la impresionante ciudad brasileña en pleno carnaval.

No contaremos mas entresijos de la trama ni elementos que revelen algunos de sus puntos fuertes como cierto detalle sobre el protagonista, que condicionará por completo el devenir de los sucesos, Río es una película realmente entretenida, con altas dosis de humor y aventura, apta para todos los públicos y totalmente disfrutable independientemente de tu edad.

Como dato curioso, hemos de hacer referencia a uno de los futuros proyectos de Pixar que fueron anunciados el pasado año y posteriormente cancelado por motivos desconocidos, según la sinopsis de NEWT, la película en cuestión, los dos últimos especimenes de unas curiosas lagartijas AZULES eran emparejados con el fin de que procrearan… como veis no son pocas las similitudes de esta sinopsis con la de la película que hoy nos ocupa, ¿mera casualidad?, sea como sea Pixar decidió eliminar NEWT de sus proyectos futuros ¿por qué será?

Una de las cosas que destacan en el film sobre el resto de elementos es sin duda el diseño de personajes. Todos los animales han sido creados con especial simpatía, cargados de expresiones humanizadas y detalles que nos arrancarán constantemente una risa por su gracia y ocurrencia. Destacan sobre el resto el protagonista, Blue, que cuenta con un abanico de expresiones pasmoso así como con un doblaje que se nos antoja perfecto para el personaje, tanto él, como su compañera de aventuras, Perla cuentan con unos diseños fantásticos que para nada desmerece al resto de secundarios siendo en cualquier caso los personajes humanos los que resultan mas típicos y poco inspirados. Mención especial al conjunto de monos que cuentan con una de las escenas mas hilarantes de la película.

 Otro de los detalles que sorprende por su ritmo y por su fuerza visual son las escenas musicales donde una banda sonora mas que notable se une a unas imágenes cargadas de colores vivos y exotismo. Todas las plumas de las aves que aparecen en pantalla han sido creadas de forma independiente y se mueven con total naturalidad. Todo un alarde artístico y técnico que convierte a Rio en una película con un estilo muy personal y diferenciado del resto.

 En lo que respecta al turbio asunto de las 3D que como bien sabéis a menudo no son mas que una excusa para cobrar mas dinero por entrada, sin ofrecer un efecto realmente notorio que potencie la experiencia, Río tiene algunas escenas en las que el susodicho efecto es utilizado de forma bastante decente sin llegar a ofrecer sensaciones como las de Cómo entrenar a tu dragón, (que sin duda ocupa el primer puesto en lo que a 3D se refiere) de modo que, aunque hay momentos en los que el efecto se utiliza de forma inteligente, tampoco se convierte en pieza fundamental para ver la película. A elección de cada uno.

En definitiva, Río es una película de animación para grandes y pequeños, con un gran trabajo en el diseño de personajes, una trama atractiva y cargada de escenas con un colorido, ritmo, banda sonora y una frescura pocas veces vista y si bien no pasará a la historia en ninguno de sus apartados, consigue hacerse un pequeño hueco en ese digno lugar al que van a parar todas las películas que consiguen hacernos pasar un rato agradable.

NOTA: 7,5