
En su parón navideño, hablamos de lo decepcionante que estaba siendo la segunda temporada de Once Upon a Time, pero había algo de esperanza de que en su segunda mitad se supieran reconducir las historias. En su lugar, los guionistas han mareado al espectador sin llegar a contar nada, despertando en los últimos episodios, cuando la audiencia y sus seguidores les han comenzado a dar la espalda.
Es tarde para la serie, o con el nuevo rumbo remontarán?
Supuestamente, Hook iba a ser el gran malvado al que deberían enfrentarse (y que promocionaban en la Comic Con), pero ha ido deambulando entre mundos, y sirviendo para más bien poco. Y eso que fue la incorporación que más nos gustó, pero no ha obtenido un mínimo de atención, y un desarrollo coherente e interesante. Y lo mismo podríamos decir con absolutamente todos los personajes, dejando una temporada desastrosa, con muy pocos momentos a destacar.
Todo lo mencionado, lo hemos podido comprobar viendo la season finale, un episodio torpe y mal escrito, pero que deja la idea de una probable mejor tercera temporada, y es que el nuevo rumbo ha sido lo único que nos ha gustado de esta temporada.
SPOILERS A PARTIR DE AQUÍ