Estrenada como una sitcom más de enredos familiares, Modern Family llegó en septiembre del 2009 con la novedad de su recurso del estilo documental, es decir, que además de seguir a los protagonistas, éstos hablan directamente a cámara como si fueran entrevistados.
El piloto no me pareció de sobresaliente, pero si sus personajes, que tocan todos los géneros y estereotipos y ese es un gran punto a su favor, ya que abarca todo tipo de público.
El encanto de la serie radica precisamente en eso, sus personajes, muy bien construidos y muy bien tratados durante todos los episodios, y si además se juntan todos, se aseguran un episodio memorable.