CRÍTICA THE GLEE PROJECT PREMIERE

Ryan Murphy, cocreador y productor de Glee, extraerá hasta el último centavo de la serie de Fox, que ha resultado ser un fenómeno televisivo y musical, y que esta llenando la cuenta bancaria de Murphy con cifras que ni podemos imaginar.

Y esta claro porque Ryan accedió a producir un talent show para el canal Oxygen basado en su serie musical, con el reclamo de que el ganador participaría como invitado en episodios de la tercera temporada, el coste para él es cero y todo son ganancias. 

El domingo se estrenó el nuevo programa con el nombre de The Glee Projetct, y ya desde el comienzo dejan claro que todo el equipo de Glee esta tras las cámaras, tenemos los decorados, el narrador, el equipo entero de la serie y la aparición de Darren Criss (Blaine), que da ánimos a los concursantes.

Comienzan como un episodio presentándonos brevemente a los concursantes (con la misma voz en off que nos dice cada semana eso de "previously on Glee"), todos algo estereotipados o sacados de contexto. Todo me suena a promoción y a rentabilizar todavía más el producto, ya que misteriosamente todos los concursantes están muy sueltos antes las cámaras, todos tienen un rol adaptado y como no, son muy diferentes entre ellos. Se nota que tienen muy claro quien será el ganador, y me ha parecido denigrante el caso de Matheus, un chico de baja estatura, al que le meten en la cabeza que ha de tener confianza, y se lo toma al pie de la letra llevando hasta el extremo la palabra, no deja de posar,  y su momento en la actuación grupal deja constancia de que se ha tomado los consejos al pie de la letra.

No soporto a Alex, el chico negro y con demasiado afán de parecerse a Kurt, esta sobreactuado hasta cuando pestañea, es odioso y se agradece que no aparezca mucho en el programa.

De los demás destaco a Ellis, una chica de 18 años que aparenta tener unos 12, y pide que nos creamos que tiene 18 pero actúa como si realmente tuviera esos 12, no termina de cantar bien y es notable que ha sido seleccionado por su apariencia.

Del resto no hay que destacar a ninguno porque todos son típicos roles de estudiantes y con voces convencionales en estos programas.

La mecánica es sencilla, los concursantes pasarán la rutina de los actores de la serie, cantaran en el estudio, ensayarán la coreografía y grabaran la escena, que en el primer programa es una versión grupal de Firework, canción de Katy Perry y que versionó Lea Michele. El resultado es correcto exceptuando un momento algo penoso en el que aparece Matheus sin camiseta frente a un croma de fuegos artificiales, en serio, muy patético.

Una vez visto el resultado final hay tres nominados que cantarán de forma individual frente a Ryan Murphy y dos ayudantes, los cuales seleccionarán al eliminado.

Como fan de Glee es curioso el mimo que ponen en detalles, como al final del programa donde se sabe el eliminado por una lista idéntica a la de las audiciones de la serie, y con la estrella de Rachel al lado de los que se salvan esa semana, los granizados, decorados, la música y transiciones.

No se si veré toda la edición, más allá de que me guste el programa del que proviene, no  engancha, entretiene por su corta duración, pero no tardas en olvidarte de los aspirantes a un papel.  Es una pena ver como Glee se esta convirtiendo más en un producto que en una serie, no me parece bien que metan a uno de estos en la serie si su papel será importante, porque hay demasiados personajes interesantes que se han dejado sin tratar, y ninguno de los presentados en esta ocasión me produce interés alguno.

Le pido a Murphy que deje de explotar el programa porque terminará jugando en su contra, de hecho muchos odian Glee por la sobreexplotación que tiene en EEUU ( hasta videojuegos).

NOTA:5'5/10